Comisario

“Cada una de mis obras es una conversación con el espectador a través del prisma de formas simbólicas. Combino la nitidez de las imágenes y la suavidad del encuadre de formas hiperbólicas, de modo que tal simbiosis es capaz de contar completamente una historia independiente y tocar almas de todo el que mira el lienzo”.

Todos los cuadros de esta famosa pintora israelí es una mezcla de diferentes direcciones. Irina se inspira en el simbolismo, que conecta fácilmente con realismo y un toque de filosofía.

Los críticos dicen de ella: «Saltaste como un demonio de una caja de rapé, e incluso no tienes estudios artísticos! «

Sin embargo, Irina Markova-Shagal cree que una persona con talento no lo necesita. Ella cogió pincel a los 58 años. A partir de la pintura, descubrió una profunda creatividad: comenzó a escribir poemas y canciones, guiones para cuentos de hadas para niños, que se han escuchado desde el escenario del teatro durante más de ocho años, se publica en revistas con sus artículos populares y analíticos. Las obras de Irina están en oficinas gubernamentales y colecciones privadas en todo el mundo.

El ansia de creatividad se debe a los genes familiares: Irina es la nieta del gran Marc Shagal. Los cuadros de Irina son muy reconocibles, en ellos se puede rastrear hilos de parentesco con el famoso pintor.

Irina Markova-Shagal pone toda su alma y su personalidad, las experiencias, su propia visión especial del mundo y su comprensión. Esto la hace similar a los héroes del proyecto, que son artistas con TEA.

“Las experiencias de artistas especiales son comprensibles y cercanas a mí. Percibimos el mundo que nos rodea de una manera muy similar. También utilizo la pintura como ellos para expresarme en ella. En Autstraction, una nueva dirección en el arte, veo un gran potencial y singularidad.”

Irina Markova-Shagal